Me gusta jugar con las palabras. Y dar vuelta frases, también.
“Que el árbol no tape al bosque” es una frase que escuché muchas veces. Tiene sentido si pensamos en que a veces el hacer demasiado foco en un problema o situación puntual nos quita la perspectiva. No nos permite ver y analizar todo el contexto. Cuando esto sucede, es difícil diseñar una estrategia.
Pero si lo pienso al revés, es decir dando vuelta la frase, también tiene mucho sentido: “Que el bosque no tape al árbol”.
¿Cuántas veces no sabemos por dónde empezar porque es tanto lo que hay por delante que al final resulta tedioso o abrumador? Son tantos los árboles que hacen al bosque que al final no vemos con claridad a ninguno…
¿A dónde voy con todo esto?
Abordar una transformación hacia lo sostenible muchas veces es ver un bosque en el que cuesta identificar los árboles.
Con las webs sustentables ocurre lo mismo.
Si diseñar una página web sustentable es aplicar buenas prácticas… ¿Por cuál empezar?
Y aquí viene la respuesta que le doy a cada persona con quien nos reunimos:
La mejor manera de ir hacia una web sustentable es elegir un hosting verde. Un proveedor de alojamiento para que tu web funcione con energías renovables.
Ya con elegir a ese proveedor que trabaja con consciencia ambiental generas una acción en línea con la sostenibilidad.
Microsoft, por ejemplo, sumerge sus equipos en el mar en cápsulas aisladas y los refrigera con aguas submarinas. Google se provee de energía con paneles solares que instala en superficies desérticas. Amazon Web Services se abastece de energía eólica.
Lo bueno es que muchos de los proveedores de hosting usan la infraestructura de estas grandes empresas para sus servicios. Incluso algunos, además de ofrecer servidores verdes, incorporan buenas prácticas de sustentabilidad en sus procesos y así multiplican el impacto positivo. Uno de ellos es WNPower, la primera empresa hosting green de la Argentina.
El primer y más sencillo paso para reducir la huella de carbono de una página web es elegir un hosting verde.